Dinamizar un comercio, ¡Sí!, pero ¿Cómo?

En Relanza360 mantenemos que para dinamizar un comercio cada cierto tiempo es necesario replantear, repensar y relanzar la idea de negocio.
A veces porque las ventas no van bien y otras veces porque los negocios necesitan ser actualizados continuamente, ya que mientras más tiempo pasa más anticuado nos vamos quedando con relación al mercado.
Los clientes cambian, la tecnología avanza, la competencia zonal crece, aprende y mejora.
La competencia global vía on-line y los grandes centros comerciales con su poderío “marketiniano” hace imprescindible actualizar, innovar, dinamizar y relanzar.
Ni es tan difícil ni caro como parece a primera vista.
Inicialmente, y de forma radical, hay que atacar en 4 sitios de máxima relevancia.
Imagen, Comunicación, Nuevas tecnologías y Ventas
1. IMAGEN:
tiempos, es uno de los pasos imprescindibles a la hora de potenciar y dinamizar un comercio.
-
Papelería
Tarjetas, flyers, catálogos, dípticos…
-
Decoración interior
Escaparates, estanterías, paredes…

Vinilos, rótulos…
-
RRSS
Nuevo logo en web, face, mail…
El cliente aprecia positivamente el cambio y el personal de la empresa también, es un acto de renovación que nos hace acometer otra etapa con renovadas fuerzas e ilusiones.
La comunicación de estos cambios permite, de paso, un nuevo acercamiento a los clientes
Para dinamizar un comercio no es suficiente con tener un buen producto, buena atención y buenos precios, ¡hay que decírselo a los clientes y a los futuros clientes!
Para dinamizar un comercio o cualquier negocio hoy es imprescindible el buen uso de los medios de comunicación y redes en general.

Hoy es imprescindible disponer de una buena página web. Que haga que nuestro negocio traspase los límites del entorno cercano y local, haciéndolo más global y con mayor alcance. Así conseguimos comunicarnos con un público potencial mucho más amplio.
Si ya se dispone de una página web entonces hay que trabajar en mantenerla actualizada de contenidos (ofertas, productos, noticias), en posicionarla bien (de nada sirve el esfuerzo si los clientes no nos encuentran en la red) y en optimizar la navegación (hoy tiene que estar diseñada para acceder desde un teléfono, una tablet, un pc, etc.)
-
Redes sociales
Las redes sociales tipo Facebook o Twitter permiten una comunicación más ágil con nuestros clientes. Hacerles partícipes de noticias del sector, precios especiales, novedades de productos es algo que en estos medios se puede hacer de forma rápida. Más puntual y concreta, sin necesidad de afectar a la información que figura en la web. Manteniendo por supuesto la misma imagen línea de diseño e imagen corporativa que nos hace reconocibles. También un perfil de Facebook es más fácil de actualizar, añadir textos e imágenes, para los que no somos especialmente habilidosos en temas informáticos, que una web.
-
E-Marketing
En los puntos anteriores veíamos las formas de mantener información disponible para nuestros clientes o potenciales, pero de una manera más pasiva, ya que esta no será útil hasta que el cliente acceda nuestros medios.
El uso del e-mail para comunicarnos con el cliente es más proactivo. Nosotros nos dirigimos al cliente, llegamos a su empresa, nos hacemos visible. Cuidando mucho de no excedernos en la cantidad de envíos que se realizan. Ser agobiantes enviando multitud de mails produce en efecto de rechazo, que es todo lo contrario de lo que se busca al dirigirnos a nuestros clientes.
El envío de mails con precios, novedades, campañas, también necesita de un buen diseño, en línea con nuestra imagen corporativa. Por este medio conseguiremos también que el cliente que aún no nos conoce se haga una idea sobre nosotros. Por tanto, el envío ha de ser de calidad. Visual e informativa.

3. NUEVAS TECNOLOGÍAS
Llevar un negocio en un cuaderno o en una tabla de Excel no sólo es anticuado y da mala imagen, lo peor es que nos quita muchísimo tiempo para gestionar otras áreas del negocio.
Hoy las nuevas tecnologías permiten disponer de aplicaciones sencillas y económicas, que gestionen nuestro negocio. Controlar productos, clientes, ventas, hace que sepamos más de nuestro negocio.
Utilizar un programa de gestión de empresa no necesita saber informática. Suelen ser intuitivos y de fácil aprendizaje. No tengamos miedo a dar este importante paso.
4. VENTAS
Evidentemente todo lo que hemos hablado hasta ahora va encaminado a conseguir más y mejores ventas. Transmitiendo a nuestros clientes información moderna basada en una imagen actualizada y vendedora.
Ahora bien, dentro del área comercial hay algunos puntos que no se deben perder nunca de vista, de los que destacaremos 4 de ellos:
- Foco en el cliente.

Crear tarjetas de fidelización, cumplir los plazos previstos de entrega, comunicarse con tiempo con el cliente si algo no va a estar en plazo, las explicaciones posteriores sólo suenan a disculpa. Pensar siempre como si fuéramos clientes de nmaguestro propio negocio, esto que voy a hacer ¿me gustaría si yo fuera cliente de este negocio? ¿No? Pues no se pone en marcha la idea, o por lo menos se replantea y matiza.
- Diferenciación.
-
Ventaja competitiva.
El valor distinto y superior que buscamos para los clientes es lo que conocemos por ventaja competitiva. Algo en lo que somos especialmente buenos y únicos. Que el cliente distingue y valora.
Localizar esta ventaja competitiva y publicitarla como parte importante de la estrategia empresarial hará que consigamos atraer muchos más clientes y por supuesto nos acercará al éxito.
-
Formación comercial.
Saber negociar, argumentar, preguntar, tratar objeciones, es parte de la formación de ventas que es interesante y valioso tener.
Aunque inicialmente nos conformamos con:
¿Qué nos pasa a nosotros mismos si no nos escuchan cuando hablamos? Que nos sentimos ignorados, por tanto, como primera reacción no queremos seguir hablando con la persona que pasa de nosotros. Esto es justo lo que tenemos que evitar que sienta nuestro interlocutor, por tanto, aprendamos a escuchar. No es fácil, requiere mucha práctica, mucho esfuerzo y una preocupación continua por hacerlo. Trabajamos mucho para conseguir nuevos clientes, no los perdamos por no escucharlos.
Tenemos que entender que el cliente no suele querer explicaciones, opciones ni razones, quiere soluciones. Si escuchando hemos captado la necesidad real del cliente, no le contemos detalles insignificantes que sólo intentan demostrar lo “mucho que sabemos”, démosle la mejor solución posible. La mejor para el cliente y no para mis comisiones o facturación.
“El punto de la locura es creer que, haciendo lo mismo, obtendremos resultados diferentes”
Albert Einstein